Una Marina de estilo californiano con ínfulas de “sky line” moderno de la ciudad. Fue creada para los Juegos Olímpicos de 1992, con puerto deportivo, terrazas, restaurantes, discotecas y playa.
(…) la deslumbrante Villa Olímpica del Poblenou, construida en la zona costera más allá del puerto por donde antiguamente circulaba, entre fábricas abandonadas, el tren de Mataró. Cuando acaben los Juegos Olímpicos y las cohortes de atletas se hayan ido, miles de barceloneses adinerados se trasladarán a este barrio de privilegio.
Palabras del escritor irlandés Ian Gibson en 1992.
Citas y testimonios sobre Barcelona, Lluís Permanyer